sábado, 29 de agosto de 2009

El Tiempo

Ya eran pasadas las 10 de la mañana. El vikingo no estaba.

Tanto me había yo acostumbrado a su presencia, fue entonces que me preocupé. El mate preparado, la ambrosía con manteca sobre la mesa y los bizcohos en paquete cerrado.

Por la ventana, a mis espaldas, entre las gruesas cortinas se filtraba un as de luz. Pensé que aquel día no se presentaría, temí que nunca mas lo haga, que me haya abandonado...

Pero al crujir de la puerta se dejó ver a la tremenda naturaleza nórdica entrar con paso calmo y distraido. Como si nada hubiera ocurrido. Ahi estaba mi maestro.

-Has llegado tarde esta mañana, te esperé con el mate preparado largo tiempo. Le dije tratando de que no sonara a ningún tipo de recriminación.

-Largo tiempo... largo tiempo..? me contestó con los ojos entreabiertos clavados en los mios.

"Duración de las cosas sujetas a cambio o de los seres que tienen una existencia finita"

Nuestras charlas están sujeras a cambios, tal vez alguna mañana nos olvidemos mutuamente. Pero de ningún modo somos finitos, las palabras son eternas. Y vos y yo somos tan solo palabras. Somos lo que en los otros generamos.

Si no existiera un "otro" que nos leyera esta mañana, y todas las que sigan, de nada serviría que nos encontráramos, ahora dame un bizcocho.

El grandote engullió un puñado de bizcochos dejando sobre su rubio bigote la tercera parte de lo que había agarrado.

-Preparate un mate que tengo el gañote seco.

Iba a preguntarle por su uso del lunfardo cuando recordé que el día anterior se lo había pasado entre redoblantes y bombos murgueros... me pregunto si ahi le habrá tocado cebarse unos mates a él..?

No hablamos casi ese día, pero me auguró que Carolina Soulless había conseguido hidromiel y nos la mandaría pronto. Al parecer quedaba bastante hilo en el carretel, nos esperan muchas mas mañanas de mateadas nórdicas...

Si una pequeña incertidumbre te amarga creyendo que todo acaba, ¿por que no pensar que una ligera esperanza puede provocar que lo mas maravilloso comienze...?

Aleera mateando

miércoles, 26 de agosto de 2009

Hombres de mundo

Por la ventana entraban sonidos extraños, parecían instrumentos de percusión, pero apenas se percibían las multiples voces que lo acompañaban.

El viejo vikingo aquella mañana estaba inquieto, recuerdo que apenas había probado unas galletas dulces. Cuando generalmente devoraba paquetes enteros, esa mañana el segundo paquete aún se conservaba cerrado.

No hablaba, pero se lo notaba algo alegre. Como expectante, con la infundada certeza de recibir algún tipo de buena nueva. No quise perturbar su alegre silencio con alguna de mis preguntas.

Las voces, acercándose lentamente, se escuchaban cada vez mas claras. Eran los murgueros de "La Catalina". El Vikingo, acostumbrado a los bardos añosos, y, en estos tiempos al metal nórdico, levantó la cabeza y abrió los ojos como un chico que ve pasar el parque de diversiones ambulante por la puerta de su casa.

¿Que es eso...? preguntó. Tamaña fue mi sorpresa, él antiguo y brutal sabio me preguntaba a mi...!

Eso es el Río de la Plata, contesté inmutable. Esa es la voz de nuestra cultura, la rioplatense.

Ah! pero sos bien federal!, me respondió.

Obvié su chiste con la entereza de saber que el humor nunca es inocente y había cierta verdad en ello.

Ya se podían escuchar las voces claras, sus palabras rezaban;

"Yo conozco bien la gente
No hay derecho ni decente
Que no se lleve la de él
despertate no seas necio
cada cual tiene su precio
Que te caigas del trapecio
Todo el mundo vino a ver
Jugar limpio es peligroso
Arrimate al poderoso
que es más fácil arreglar
No te esfuerces por lo tuyo
Eso es cosa para giles
Avivate y destruile
El trabajo a los demás"

Escuchar nuevamente las estrofas de "Hombres de mundo", aquel irónico canto que resume todo lo que detesto del mundo actual, borró la sonrisa que ver contento al vikingo me había generado.

Tuve que hacer un pequeño esfuerzo dialéctico para explicarle al viejo que cantaban esas palabras de modo irónico. En los cantos de sus tierras la ironía no es un recurso habitual. Y es justamente el recurso al que mas mano echamos en estos lares para llorar nuestras desventuras y evitar pegarnos un tiro en cogote...

"Para que vas a pelearte
Con la enorme desventura
Si total van a enterrarte
Pa' que probar la locura
La locura innecesaria
Y riesgosa de VIVIR."

Fue en esa parte del paso de la murga que el Vikingo lo comprendió, cebó otro mate de hidromiel. Levantó la cabeza con un movimiento lento, como disfrutando el momento.

El hielo de sus ojos me era ya habitual, quemaban como siempre, pero me había acostumbrado a ese dolor de ver lo maravilloso y perturbante de morder un pequeño trozo de verdad.

Los primos de la murga se veían por la ventana, los percusionistas asomaban sus inquietos cuerpos...

Fue entonces que el Vikingo unió su voz a la de ellos y cantando al unísono se escuchó;

"Vivir,
aunque no sepas vivir
Aunque te cueste morir
Sobre estas tierras

Vivir,
en esta jungla infernal
Bajo un reloj demencial
Detrás de un sueño

Con la verdad
Como candil
Contra el traidor
Contra el servil"

Tamaña fue mi sorpresa, le pregunté como es que sabía esa canción final de la murga.

La respuesta creo que ya la sabía, en algún lugar de mi alma estaba escondida, me dijo:

El canto es uno solo, es el canto de la tierra. Son estas estrofas las estrofas universales, las que todo pueblo canta o debiera cantar. La de vivir sin pisar al hermano que lo hace a nuestro lado.

Eso no cambiará, suspiró con un dejo de tristeza mientras engullía un pan con manteca, pero mientras se cante habrá esperanza. Y la mas pequeña de ellas vale el esfuerzo de vivir con el coraje de no pisar a tus hermanos...

La murga siguió pasando, se alejaban lentamente. El vikingo se unió a su caminar...

Continuó cantando con ellos, poco importó a los murguistas las nórdicas vestimentas de mi maestro. Al paso le pintaron la cara tomando pintura de sus propios rostros. Todos somos uno... algunos nos pintamos la cara para poder ser verdaderos...

"Que cada buitre se lleve su botín
Me quedo con mi pobreza"

Atrocity



jueves, 20 de agosto de 2009

Ruta 29

Cuentan algunas paganas escrituras que las rutas de Buenos Aires, desde su trazado inicial, guardan algunos peligros, que bien vistos podrían ser oportunidades.

De mis entrevistas matutinas con vikingos y viejos soldados, entre mate amargo e hidromiel y un poco de ambrosía, o tal vez bizcochos "Don Satur", algunos de estos peligros me han sido advertidos.

No hace falta un traje dorado del mas puro metal empuñando una gloriosa espada para salvarse de la condena, para librar la batalla de nuestros días, contaba el cazador de las tierras de los mil lagos mientras sostenía con mano firme un mate que con toda devoción yo cebaba. Las puertas del Valhallá son todas las puertas, la salvación eterna, la vida de glorioso caballero no es solo un ideal fantástico, se puede, y se debe, serlo día a día, decía mientras escupía pequeños trozos de bizcocho. Porque, si bien, sus palabras eran profundas, sus modos seguían siendo los del buen cazador que nunca dejó de ser. Como comprender estas dualidades es tarea de Vds...

"Misteriosa Buenos Aires" de Mujica Láinez tiene partes perdidas, u ocultas" casi que lo gritó como una revelación espontánea. El grandote miró el mate en ese momento intentando, tal vez, descubrir en su contenido yerbáceo la razón a semejante declaración intempestiva.

Existe, me dijo con cara nuevamente impasible, un perro que se te aparece de modo muy amistoso, pero que oculta una extraña intención. Dicen los capítulos perdidos que darle medialunas y alguna sonrisa cariñosa nos salva de la condena al peor de los infiernos, que la aparición ni siquiera te roba el alma, porque no la quiere, y solo la desecha al quinto infierno (que dicen es el mas jodido porque ni siquiera te torturan, solo te dejan a merced del olvido mas asqueroso...), pero si uno es amable con él, te recuerda y te salva de accidentes de tránsito, por ejemplo.

No te lo dije antes para no asustarte, pero solemos andar muy cerca de la condena eterna, solo la suma inclaudicable de los detalles cotidianos puede evitar que perdamos el alma, las ganas de vivir y la potestad de amar...

Dicho eso retomo su interés de alimentarse. Ante mi estupor tomó de mis manos el termo, y caminando despacio se alejó mientras cantaba un antiguo bardo nórdico y se cebaba unos deliciosos mates de ambrosía...

A la vez que se alejaba su voz se hacía mas clara, ¿o eran sus palabras en mi cabeza?, caminaba y cantaba...

"A lonely bard wandering across the lands am I
Singing dancing finding answers to every why
The taverns are full and one crosses my path, too
I just might reward myself with a beer or two"

Wormy


martes, 18 de agosto de 2009

Life, birth, blood, doom...

Ya caminaba solo por las páginas de mi vida, casi autómata. Aquel encuentro con el Viejo Vikingo me perturbó, no haberle podido dar esperanzas me hizo sentir tan deprimido como él lo estaba, pero también una carga de frustración me inundó.

Al doblar en una esquina cualquiera me encontré con otro cansado soldado.

Ya no intento convencer a nadie, tampoco a mi mismo, de que la mañana puede traer un nuevo sol. No se si porque ahora sé que ese sol es el mismo del día anterior o porque cuando intento hacerlo recuerdo los ojos duros y cansados del Viejo Vikingo.

Fue entonces que, con el viejo soldado, comulgamos en tristezas. El me gritaba el dolor de haber perdido a su amigo y yo respondía vomitando mi odio por la velocidad del mundo actual.
No recuerdo casi sus ojos, tal vez estaban cerrados. Tal vez estaban húmedos por esas lágrimas que oculta del resto del mundo, y que, por casualidad tal vez, en aquella esquina me tocó espiarlas a mi.

La sensibilidad siempre corresponde al observador, no es objetiva.

Y ver a un gigante sangrar en silencio me conmueve hasta la melancolía.

MateandoConElVikingo


viernes, 14 de agosto de 2009

10th man down

El viejo Vikingo entonces me miró a los ojos,
el hielo de sus ojos celestes me quemó la mirada.

Fue entonces que incorporándose me escupió estas palabras;

"The ultimate high as all beautiful dies
A rulers tool, a priests excuse, a tyrants delight...
I alone, the great white hunter
Ill march till the dawn brings me rest
10th patriot at the gallows pole!"

Quise decirle que no estaba solo, que el amanecer podría traer mas que el descanso de la muerte.

Quise, pero supe que no podría creerlo ni siquiera yo...

Mateando con el Vikingo